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DVL – Sonda de velocidad Doppler

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Registro de velocidad Doppler Movimiento del eje DVL

Un registro de velocidad Doppler (DVL) es un sensor acústico utilizado para medir la velocidad de un vehículo submarino en relación con el lecho marino o la columna de agua. Funciona emitiendo ondas sonoras desde transductores inclinados hacia abajo o hacia fuera. Estos pulsos acústicos se reflejan en el lecho marino o en las partículas suspendidas en el agua y regresan al sensor. A continuación, el sistema calcula el desplazamiento Doppler (el cambio de frecuencia entre las señales emitidas y recibidas) para determinar la velocidad del vehículo en tres dimensiones (Surge, Sway y Heave).

Los DVL son esenciales para la navegación submarina, especialmente donde las señales GNSS no están disponibles. Al integrar la velocidad a lo largo del tiempo, los DVL ayudan a estimar la posición, a rastrear el movimiento y a mantener un rumbo estable. Se utilizan habitualmente en vehículos submarinos autónomos (AUV), vehículos operados a distancia (ROV) y sumergibles tripulados. Estos sensores también se utilizan ampliamente en aplicaciones como la investigación oceanográfica, la topografía submarina, la instalación de infraestructuras marinas y la inspección de tuberías. Los DVL de alta precisión suelen integrarse con sistemas de navegación inercial (INS) para mejorar la precisión y la robustez, especialmente en entornos difíciles.

Corredera Doppler (DVL) en ROV o AUV
Registro de velocidad Doppler (DVL) y sistema de navegación inercial (INS) integrados en un AUV. | Fuente: SBG Systems

En general, un DVL proporciona datos de navegación críticos, lo que permite un funcionamiento y una maniobrabilidad fiables de los sistemas submarinos tanto en misiones de aguas poco profundas como en misiones de aguas profundas.

Para comprender la importancia de los sensores DVL, es importante explorar primero qué son y cómo funcionan. Esencialmente, un sensor DVL es una herramienta de navegación acústica que mide la velocidad de un vehículo submarino en relación con el lecho marino o la columna de agua. Funciona emitiendo ondas de sonido desde múltiples transductores en ángulo hacia abajo.

El sensor emite ondas que rebotan en el lecho marino o en las partículas del agua y luego regresan, lo que le permite analizar el cambio de frecuencia entre las señales emitidas y recibidas —el efecto Doppler— para determinar la velocidad.

Arquitectura de los sensores

Profundizando en su arquitectura, los sensores DVL incluyen varios componentes críticos. Los transductores sirven como emisores y receptores de pulsos acústicos, formando la base del proceso de medición. El procesador integrado es responsable de interpretar el desplazamiento Doppler y calcular los vectores de velocidad resultantes. Además, una carcasa duradera protege todos los componentes electrónicos internos de los duros entornos submarinos, garantizando un funcionamiento y una fiabilidad a largo plazo. Por último, una interfaz de datos vincula el DVL a sistemas externos, como un sistema de navegación inercial (INS) o registradores de datos integrados, lo que permite una integración perfecta en plataformas submarinas complejas.

Configuración geométrica Doppler Velocity Log (DVL)
Configuración geométrica del registro de velocidad Doppler (DVL). | Fuente: SBG Systems

Además, los sensores DVL hacen algo más que medir la velocidad: desempeñan un papel fundamental en las soluciones integrales de navegación submarina. Los sistemas DVL estiman la posición de un vehículo integrando los datos de velocidad recogidos continuamente a lo largo del tiempo. Esto es especialmente útil para los vehículos submarinos autónomos (AUV) y los vehículos operados a distancia (ROV), que dependen de dichos sensores para mantener trayectorias precisas durante las misiones.

Beneficios de los DVL en la navegación

Además de la navegación, los DVL son indispensables en la topografía y cartografía submarinas. Los sensores DVL proporcionan datos de velocidad en tiempo real y de alta resolución. Estos datos permiten un seguimiento y un posicionamiento precisos. El posicionamiento preciso es esencial para la cartografía del lecho marino, la inspección de infraestructuras y la supervisión medioambiental. Los topógrafos utilizan los datos del DVL para construir mapas batimétricos precisos. También localizan activos submarinos con esta información. Además, supervisan el movimiento de sedimentos a través del fondo oceánico.

Además, los sensores DVL encuentran importantes aplicaciones en la investigación oceanográfica. Los científicos los utilizan para medir las velocidades de las corrientes de agua, analizar los patrones de transporte de sedimentos y estudiar el comportamiento de los animales marinos. Mediante la colocación de plataformas equipadas con DVL en lugares estratégicos, los investigadores pueden recopilar valiosos conjuntos de datos a largo plazo que contribuyen a nuestra comprensión de la dinámica marina y los cambios relacionados con el clima.

Pasando a los usos industriales, los sensores DVL se utilizan ampliamente en el sector del petróleo y el gas en alta mar. Aquí, la navegación y el posicionamiento precisos son primordiales, especialmente a la hora de desplegar y dar servicio a infraestructuras submarinas como tuberías, cabezas de pozo y elevadores. Los sensores DVL permiten un control preciso de los vehículos submarinos que realizan tareas complejas a profundidades significativas, mejorando tanto la seguridad como la eficiencia operativa.

Desde un punto de vista tecnológico, varios avances clave garantizan el rendimiento y la fiabilidad de los sistemas DVL modernos. Los transductores acústicos de alta frecuencia ofrecen una resolución excepcional para tareas de corto alcance, mientras que las frecuencias más bajas permiten mediciones de mayor alcance. Los sofisticados algoritmos de procesamiento de señales mejoran aún más el rendimiento al filtrar el ruido ambiental y compensar los cambios en la salinidad, la temperatura y la presión, factores que influyen significativamente en la propagación del sonido bajo el agua.

Además, muchos sensores DVL funcionan en tándem con los sistemas INS y GNSS. Cuando se combinan, estas tecnologías ofrecen capacidades de navegación robustas que son resistentes a la pérdida de señal y a las perturbaciones ambientales. Dicha redundancia es fundamental durante las misiones de larga duración o en condiciones de aguas profundas donde no se dispone de referencias de posicionamiento externas.

Es importante destacar que los procedimientos regulares de calibración y compensación ambiental son esenciales para mantener la precisión de las mediciones. Los técnicos deben ajustar periódicamente el sensor para tener en cuenta las condiciones cambiantes, garantizando la integridad de los datos en una amplia gama de misiones y entornos operativos.

En conclusión, los sensores DVL se han convertido en una piedra angular de las operaciones submarinas modernas. Permiten una navegación fiable, apoyan la exploración científica, mejoran los flujos de trabajo industriales y aumentan la precisión de la cartografía submarina. A medida que la tecnología acústica y el procesamiento de datos siguen avanzando, los sensores DVL continúan evolucionando y siguen siendo herramientas indispensables para desentrañar los misterios del océano y apoyar las infraestructuras críticas bajo las olas.

Explore cómo la tecnología DVL es compatible con una amplia gama de operaciones marinas más allá de la navegación estándar. Desde embarcaciones de superficie no tripuladas (USV) hasta vehículos submarinos autónomos (AUV), ofrecen datos precisos de velocidad y posicionamiento que son críticos para el éxito de la misión. Ya sea que se utilicen para la inspección de infraestructura submarina, el mapeo del lecho marino o la investigación científica, estos sensores garantizan un rendimiento fiable en entornos de superficie y submarinos exigentes.